Las actividades extraescolares son aquéllas que se desarrollan fuera del horario lectivo, tienen un carácter voluntario y están encaminadas a procurar la formación integral de los niños/as, en aspectos culturales, sociales y de tiempo libre. Tienen como finalidad complementar la formación y educación del niño/a potenciando sus capacidades, talentos, habilidades y destrezas favoreciendo la relación con los demás.
Estas actividades, que pueden realizarse dentro o fuera del centro docente, presentan como principal característica su carácter lúdico, que el niño/a aprenda divirtiéndose, sirviéndole de distracción de sus obligaciones y quehaceres diarios.
Las actividades extraescolares fomentan la creatividad y el desarrollo de valores, por este motivo es importante saber elegir qué actividad es la más adecuada para nuestro hijo/a, teniendo siempre en cuenta su opinión, ya que de lo contrario se convertirá en una carga. Por ello, debemos tener en cuenta factores como su personalidad, sus gustos y habilidades.
Participar en muchas actividades no implica que los niños tengan un tiempo libre de mayor calidad. Los niños deben tener un tiempo de juego individual, que favorezca el desarrollo de su creatividad; de juego en parques y espacios abiertos, que despierte su interés por el medio y la naturaleza; un tiempo de vida familiar, que refuerce sus vínculos afectivos y nos permita como padres acompañarles en su desarrollo vital. En definitiva, no es imprescindible que exista una inversión económica en todas las actividades extraescolares, para que sean de calidad. Hay múltiples alternativas como escuchar música, jugar en el parque, dar un paseo en bici, compartir una programación adecuada en la TV, leer un buen libro… Pero, sí es cierto, que implicarse en la organización y supervisión de parte del tiempo de ocio de los menores puede evitar actitudes o comportamientos inadecuados.
Los expertos coinciden en que las actividades extraescolares son beneficiosas porque favorecen el desarrollo personal y social del niño/a a la vez que influyen en un mejor rendimiento académico, y una mayor madurez personal y social. En caso de tener dudas a la hora de elegir, lo mejor es consultar con las personas que conocen la evolución del niño/a en el aula y, que nos pueden asesorar sobre qué actividad es la más adecuada dependiendo de su personalidad.
Consejos para organizar las actividades extraescolares:
- Elegir actividades acordes con la personalidad del niño.
- Dejar que el niño participe en la elección de las actividades.
- Asegurarse que la actividad deja al niño o niña tiempo suficiente para hacer las tareas escolares y disfrutar de sus amigos y su familia.
- Procurar que alguna de las actividades extraescolares sea un deporte, ya que es un medio para mejorar la salud física y mental.
AMPA CEIP Emilio Lluch 